tengo que reconocer que me salieron muy ricos. mucho mejor de lo que pensaba. a ver, se cogen los calamares, se limpian perfectamente pero sin llegar a romper el tubo. retiramos aletas y cabeza y picamos. hacemos un refritillo con ajos, cebolla, jamón, perejil y los trocitos de calamar que hemos picado. cuando está haciéndose, añadimos un poco de leche si se queda demasiado seco o un poco de miga de pan frita previamente si está demasiado caldoso o nos falta volumen para rellenar los cuerpos de los calamares.
a continuación picamos una cebolla, 2 o 3 zanahorias medianas y las sofreímos. cuando están casi hechas, vertemos eso en el interior de una batidora, añadimos queso (a gusto del cocinero, yo usé emmental rallado por ser lo que había en la nevera, quedaría bueno con trozos de queso de tetilla gallego) y dejamos en el vaso.
por último colocamos los calamares en la cacerola donde se hizo la zanahoria y la cebolla y los vamos haciendo. cuando le queda poco, vertemos ahí mismo la salsa que teníamos en el vaso de la batidora y removemos muy despacito, añadiendo leche si se nos espesa demasiado la salsa o queso si se licua mucho. así hasta que los calamares estén totalmente hechos.
de vicio, oiga.
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