un plato de los "ligeritos". y digo "ligeritos" porque es sólo un poco de pasta, verdura y leche para aportar proteínas... pero llena.
ponemos a hidratar unas cuantas setas shiitake. cogemos una cebolla, la pelamos y la partimos en gajos. lo mismo con un tomate (pelarlo es opcional). fileteamos 2 dientes de ajo y troceamos uan guindilla. quitamos las hebras y cortamos al bies unas judías verdes y ponemos a hervir los tallarines. bueno, podemos alterar el orden y hacer primero lo de hervir la pasta, que nos llevará más tiempo. sí, definitivamente eso nos ahorrará tiempo.
la pasta hervida (más bien que nos quede poco hecha) la dejamos escurriendo enjuagada. salteamos los ajos, las judías verdes, las setas troceadas, luego la cebolla y, por último, el tomate. de hecho, el tomate podemos echarlo con la pasta.
cuando las judías y las setas llevan unos 4-5 minutos en el wok haciéndose, añadimos un chorrito de leche, un poco de salsa de soja, la guindilla picada y salamos. cuando rompe a hervir, seguimos moviendo otros 4 o 5 minutos. entonces añadimos la cebolla y, cuando se haga, volcamos la pasta y el tomate y removemos hasta que la pasta termine de hacerse con el líquido que hemos puesto más el que suelten las verduras.
recomiendo al que le gusten las judías más pasadas que las hiervan unos minutos junto con la pasta para que se le queden a su gusto. particularmente, me gustan crujientitas.
tiempo: 25-30 minutos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario