las fajitas son un recurso muy útil para salir del paso rápido aprotando hidratos de carbono a cualquier plato que tenga pocos, por lo que vemos que también ayuda a una dieta equilibrada (la regla del 65-30-5, los porcentajes diarios de glúcidos, lípidos y proteínas).
en el primer caso he hecho una ensalada fresca de verduras. para ello, picamos un poquito de col, otro de lechuga, zanahoria rallada, ajo picado minúsculo, tomate, pimiento verde y calabacino, todo picado muy fino. lo pasamos por la sartén pero muy poco tiempo, el justo pa salipimentarlo. en seguida añadimos los huevos batidos y cuajamos la tortilla con los vegetales casi crudos, por eso todos picados muy pequeños.
luego tostamos la fajita un poco y la rellenamos con la tortilla (hay que hacerla finita). enrollamos, dejamos enfriar un poco y a comer.
la fajita de restos es la que hice con un pcoo de cebolla, otro de pimiento, salteado con lo que me quedaba de un pollo a la nosequé de algún chino que encargaría y algo de salsa de soja. se hace todo, se tuesta la fajita y se rellena. ojo al llenar la fajita, que debemos añadir poca salsa, que si no gotea luego y.... bueno haced lo que queráis, después de todo, ¿a quién no le gusta chuparse los dedos comiendo?
y la última, la fajita española. un revuelto de cebolla, pimiento, algo de papa rallada, ajito y huevos. todo mezclado y rellenando otra fajita.
y así, miles.
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