no sé si es a la vasca o no, pero cuando la probé, con esa forma y esa textura (el sabor no lo he conseguido, pero es que me estaba comparando con un maestro), estaba yo en un asador a las afueras de donosti.
necesitamos una cebolla, bacalao desmigado y desalado y media docena de huevos. sal y pimienta. y, por supuestísimo, una buena sartén antiadherente para tortillas.
rehogamos la cebolla y el bacalao juntos en una sartén a fuego medio. cuando esté hecho, lo sacamos, y dejamos en un cuenco grande sin esquinas. cuando se enfríe, rompemos los 6 huevos, salpimentamos y batimos todo junto. si añadimos los huevos con el bacalao y la cebolla en caliente, puede que el calor residual de los alimentos cuaje las proteínas del huevo y no quedará entonces igual. podríamos hacer un revuelto pero ya no una tortilla.
por último, ponemos una pizca de aceite en la sartén de tortillas y volcamos, con el fuego fuerte, todo lo que hemos batido junto. cuando empiece a hacerse, deberemos recoger los bordes y juntarlos hacia el centro, para que quede con esa forma casi rectangular y que la tortilla sea gordita, para que el interior esté jugoso. vamos dándole vueltas, con 2 o 3 en total debería ser más que suficiente. y cuando esté a nuestro gusto, la sacamos.
comos e ve, me gusta crudita. si a alguien le gusta más hecha por aquello de lso prejuicios, pues que baje el fuego a medio hacer la tortilla y así se le hará más por dentro y menos rápido por fuera.
tiempo: 15-20 minutos.
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