un plato fácil... hecho a partir de uno preparado.
necesitamos queso, leche, pimienta negra, ajos, sal, arroz (mejor de grano grueso, aunque yo lo hice con un grano largo) y un pollo asao de los que se compran en las pollerías.
picamos muy finos los ajos y los salteamos en una sartén. cuando están, añadimos arroz y removemos. a continuación, le vamos agregando, poco a poco, caldo del pollo.
ahora mezclamos en un vaso leche y caldo de pollo a partes iguales y se lo agregamos al arroz conforme se va acabando el que ya tiene, de talmanera que el vaso lo echamos en 3 o 4 veces, siempre dejando que el arroz absorba lo que hemos añadido antes. si se consume el vaso entero, podemos agregar agua del grifo y santas pascuas. tambiénd epende de lo fuerte que lo queramos de sabor. si nos gusta que sepa mucho (ojito a quitarle todo el sabor al queso), menos leche, menos agua y más caldo de pollo. si lo queremos más cremoso, más leche, menos caldo de pollo y menos agua (ojito que nos puede quedar muy dulce). si lo queremos con más sabor intermedio, pues más del agua y menos de lo otro. en cocina hay que jugar y experimentar.
cuando el arroz está casi hecho en su punto, le espolvoreamos queso rallado, revolvemos para que se funda y distribuya homogéneamente. colocamos un par de piezas de pollo y decoramos con queso brie (por ejemplo. podemos poner si no un poco de cheddar, gouda, de oveja no demasaido duro o incluso un poco de azul o cabrales mezclado con queso en lonchas que matiza la potencia del sabor ese).
yatá.
tiempo: lo que tardemos en ir a por un pollo a la tienda de pollos más unos 20 minutos del arroz.
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