una idea buena que al final no salió como pensaba. habrá más pruebas, no hay que preocuparse...
tras hacer varios ramen, se me ocurrió que el caldo tenía un buen sabor (la mezcla de la salsa donde se cuece la carne + el caldo de verduras y pollo) y eso, concentrado, podría usarse para hacer unas croquetas con algunos trozos de lo que lleva el ramen (menos la pasta: pasta + pan rallado + harina iba a ser excesivo carbohidratos), así que sólo carne, cebolleta y col picadas muy finas.
para hacerlo, hacemos una bechamel en la que mezclamos la leche con el caldo (ahora creo que podría hacerse con nata, para que no sea demasiada agua. derretimos la mantequilla en la sartén, añadimos la harina y sofreímos para que no quede sabor a crudo. desde este momento no podemos dejar de moverlo todo para que ni se pegue (y sepa a quemado) y para evitar los grumos (se cargan la textura de una buena croqueta).
añadimos la mezcla de leche con caldo de ramen poco a poco y así hasta que quede una masa fina que olerá muy bien (a ramen). al final, cuando está casi hecha, añadimos la carne y la verdura picada (ésta última la habremos mantenido en agua fría para que queden crujientes dentro de la croqueta).
la masa la metemos en una bandeja y lo metemos en la nevera. cuando esté bien fría la mezcla, estará más durita y se podrá trabajar con ella.
con un par de cucharas sacamos la masa y vamos dándole forma de croquetas. yo las hice de dos tipos, que en la foto no se diferencian apenas. una era pasando las croquetas por huevo y pan rallado. la otra, en vez de pan rallado, era por la cosa esa que usan los japoneses para rebozar las cosas, que salen mucho más crujientes. creo que es parecido a freírlas pasadas por huevo y copos para hacer puré de papas.
luego, a la nevera otra vez y, cuando queramos, podemos freír en aceite muy caliente y, al comerlas, quedarán casi líquidas de lo cremosas que son (por la cantidad de agua que añadimos con el caldo).
muy ricas, pero les faltó potencia en el sabor. a la próxima, lo que haré será concentrar el caldo antes de mezclarlo con la leche.
tiempo: casi una hora.
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