es que me encanta el plato este. claro que necesita sus buenas 3 o 4 horas de cocción, lo que no lo hace fácil de aparecer con cierta frecuencia en nuestros menús diarios. pero se hace lo que se puede.
en este caso, va acompañado de un aromático arroz basmati salteado con un poco de curry y verduritas en brunoise.
para hacer el rabo, debemos salpimentar y luego enharinar los trozos de rabo. los sofreímos con aceite a fuego medio fuerte dándole vueltas para que no se quemen en una cazuela grande donde vayamos a hacer el guiso. en cuanto se doren, los retiramos y reservamos.
mientras, hemos picado en trozos groseros un puerro, una cebolla y un par de zanahorias, que echamos al aceite junto con unos granos de pimienta negra y unas hojas de laurel. añadimos algo de agua o caldo de carne y rehogamos las verduras. en cuanto la cebolla empieza a estar blandita, añadimos la carne, añadimos una botella de vino (par aun kilo o más de rabo de toro), removemos, bajamos el fuego a medio y dejamos con la tapadera ladeada. movemos cada 20 minutos (más o menos), controlamos el líquido, rectificamos de sal cuando lleve más de dos horas cociendo.
cuando lleve una hora cociendo (si falta caldo, añadimos más agua o caldo), bajamos más aún el fuego y dejamos reducir despacito otras 2 horas por lo menos. hay que remover de cuando en cuando, no sea que se pegue.
finalmente, sacamos los trozos de carne y la salsa la podemos colar o pasar por la batidora, dejándole la textura que más nos guste.
para el arroz, sólo debemos cocerlo y saltear un poco de zanahoria, calabacín y la parte verde de la cebolleta. añadir el arroz, un poquito de mantequilla, un poquito de curry (muy poco, debe ser una guarnición y no tener más aroma que el rabo de toro) y removemos hasta que el arroz quede levemente crujiente. queda muy bien en el wok.
servimos y comemos.
tiempo: entre 4 y 6 horas, depende de lo que dejemos cocer.
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