como es un plato típicamente onubense, lo titulo así, en singular pero significando en plural.
picamos el choco en tiras, la cebolla en aros finitos y las papas en trozos medianitos.
salteamos en la cacerola un par de dientes de ajo laminados. a continuación ponemos la cebolla y las papas. añadimos otro poquito de aceite para que las papas estén bien untadas y removemos. ahora lo dejamos a fuego medio, medio tapada la cazuela y con un vaso que lleve mitad de agua y mitad de vino blanco.
al cabo de unos 5 minutos, cuando se está secando, salamos, añadimos los chocos en trozos y tiras y añadimos más agua. rectificamos de sal, añadimos colorante y dejamos que siga. está claro que, si lo hacemos con azafrán, gana ese toque, pero le vamos a dejar el protagonismo del plato a lo choco.
siempre tenemos que controlar que la cantidad de caldo o líquido que añadimos no puede ser mayor de lo que las papas pueden absorber (esto viene a ser como su volumen). si añadimos más agua, deberemos destapar y subir un poquito la lumbre. si echamos de menos... bueno, eso tiene fácil arreglo.
dejamos que se haga. cuando las papas empeizan a deshacerse al presionarlas sin mucha fuerza, es el momento de servir.
tiempo: 35-40 minutos.